Nicola Lococo: Me río

Me río y no paro de reirme. Me río hasta hartar. Me río de los que mueren en carretera, porque me hace gracia que no demanden al gobierno y a las empresas automovilísticas por construir y permitir que circulen vehículos que parecen ataúdes con ruedas.
Me río de cuantos mueren en accidentes laborales porque resulta gracioso y divertido el caso que se les hace desde la administración y los medios de comunicación. Me meo de risa de quienes mueren de cáncer contraído por vía alimentária o medioambiental, porque es para mondarse que de ello se le culpe al desarrollo y al progreso.
Me troncho y me duele la garganta de las carcajadas, de cuantos contraen distintos tumores debidos a vivir cerca de antenas de telefonía escondidas bajo soportes de falsas chimeneas, que dan sus dividendos a los vecinos del bloque de enfrente, porque seguramente se valgan del móvil para hablar de su enfermedad con el médico. Me río de los que mueren en el Estrecho por pasar a una vida mejor, porque si lo pensamos bien, consiguen su objetivo.
Me río de los que padecen hambre, sed, enfermedad y frío porque sin comerlo ni beberlo, gracias a ellos viven infinidad de mercenarios de la solidaridad que les abordan en forma de humanitaria Oenege ... en definitiva, me muero de risa por todos los que se mueren y todos los que se van a morir sin enterarse de lo divertido y gracioso que es su muerte para la sociedad. Y seguramente ésta actitud mía, a la mayoría de ustedes les escandalice, les parezca espantosa y les mueva a la ira, porque ustedes, seguramente sientan pena y mucha aflicción por todos ellos. Pero... ¿y a ellos, a fin de cuentas qué más les da que nosotros nos riamos o lloremos su desgracia? ¿Qué les cambia su circunstancia? ¿Qué ganan con una u otra actitud?
En los antiguos circos, en las películas del cine mudo, y aún en las de superhéroes, nos hace gracia las patadas que los payasos dan a los enanos en el culo, las caídas de Charlot en el asfalto, y los tiros en la frente que Scharzenegger da a su oponente como divorcio...Si no vamos a hacer nada por cambiar la realidad, es mejor reírse y pasarlo bien cínicamente que llorar y rasgarse las vestiduras como buenos fariseos.

Nicola Lococo