Maduras en la tele

Con presentadoras así, ¿quién se fija en lo que dicen? Melissa Theuriau: presentadora TV

EN un ataque de sensatez, la BBC ha hecho público un anuncio para contratar a una presentadora de más de 50 años para sus informativos, una edad casi jurásica comparada con la que se estila por estos pagos. Y ha tenido que hacerlo ante la avalancha de protestas por la desaparición en sus pantallas de las mujeres maduras que, al parecer, se convierten en invisibles a cierta edad.

Hasta la fecha, lo normal era que las cadenas apostaran por una locutora insultantemente bella y joven, con mechas y dentadura perfecta, capaz de dejar boquiabierto al telespectador mientras le da de comer los comunicados gubernamentales convenientemente triturados.

Naked News llevó esta filosofía subyacente al extremo y les pidió que se fueran desnudando mientras informaban sobre el consejo de ministros. Casi acaban con el zapping, sobre todo tras descubrir que si quitaban la voz y ponían música la audiencia se disparaba. Algo deprimente para el periodismo, pero muy satisfactorio para el share y la publicidad.

En la vida real, las mujeres maduras existen, y desde esta columna reivindicamos su presencia en televisión con los mismos derechos que esos señores añejos, con sus sienes plateadas y su aire de experiencia, sapiencia y confianza que les ancla a la silla frente al vendaval juvenil. Sólo hay un colectivo más discriminado que ellas en la caja tonta: el de los conductores heterosexuales de programas del corazón. Pero ese es otro cantar.

Josetxu Rodríguez

Comentario de Mikeloto:
La descubrí en La sexta y ahora da las noticias deportivas en Tele 5, me refiero a Sara Carbonero.
Por primera vez en mi vida me da igual que el Athletic pierda, me da igual quien gane o pierda al tenis, ciclismo, etc. vamos que no escucho lo que dice, solo la miro a los ojos y grito ¡guapa!.
Mi mujer me ha puesto un ultimatum: "o la tele o yo". Una locutora de televisión está acabando con mi matrimonio, que por otra parte, está durando demasiado.
Así que te doy la razón. Con más locutoras como la Carbonero ningún tio se habría enterado de lo de la crisis económica, ni de la Gripe A, ni de ná de ná.